La madrugada de este lunes se tiñó de luto para los habitantes de Zuluaga, tras el hallazgo del cuerpo sin vida de un hombre en las inmediaciones del puente sobre la quebrada El Oso, un sector solitario y sinuoso de la carretera que comunica con el municipio de Alejandría.
La víctima fue identificada como Wilfrido Paredes, un ciudadano ampliamente conocido y apreciado por la comunidad local. Su cuerpo fue encontrado cerca del predio Los Cerezos, junto a su motocicleta, lo que apunta a que habría sufrido un accidente de tránsito. Según los primeros informes, Paredes presuntamente perdió el control de su vehículo en una de las peligrosas curvas del tramo, caracterizado por la densa vegetación y la escasa visibilidad.
Tras el aviso de los residentes que descubrieron el cuerpo, unidades de la Policía Judicial y la Fiscalía se desplazaron al lugar para realizar el levantamiento y la inspección técnica del cadáver. La motocicleta fue encontrada a escasos metros del cuerpo, reforzando la hipótesis de que se trató de un accidente y no de un hecho violento.
El cuerpo de Wilfrido fue trasladado a la morgue del municipio de Garzón, donde médicos forenses le practicaron la necropsia con el fin de esclarecer las causas exactas de su fallecimiento y descartar cualquier posible intervención de terceros.
La espera dolorosa de una familia
Mientras avanzan los trámites legales, los familiares de Paredes permanecen en las instalaciones de la morgue, a la espera de que les sea entregado el cuerpo para poder brindarle una cristiana sepultura. Entre lágrimas, sus seres queridos han manifestado su profunda tristeza y el deseo de darle el adiós digno que merece quien en vida fue un hombre trabajador y querido en su comunidad.
Dolor e incertidumbre en la comunidad
La muerte de Wilfrido ha calado hondo en Zuluaga, una población acostumbrada a la calma, donde las tragedias no suelen golpear con tanta fuerza. Vecinos y allegados expresaron su consternación, recordando al fallecido como un hombre servicial y respetado. La noticia ha generado un ambiente de duelo colectivo.
Al tiempo que las autoridades continúan con las investigaciones, crecen las voces que exigen mayor atención a la seguridad vial en esta zona. La falta de iluminación, la escasa señalización y el difícil acceso a servicios de emergencia son factores que, según los habitantes, convierten este tramo en un punto crítico para los viajeros.
La comunidad de Zuluaga, dolida por la pérdida de uno de sus miembros, espera que este trágico episodio sirva como llamado de atención a las autoridades para mejorar las condiciones de una vía que hoy enluta a todo un pueblo.
