La presencia de las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada (ACSN) en zonas rurales de Ocaña (Norte de Santander) y el sur del Cesar ha encendido las alarmas entre la población y las autoridades. Imágenes y videos difundidos en redes sociales muestran a integrantes de este grupo armado incursionando en varios corregimientos, lo que ha generado temor y zozobra en las comunidades locales.
Este grupo, que mantiene operaciones principalmente en los departamentos de Magdalena, Cesar y La Guajira, estaría expandiendo su influencia en una disputa territorial con el Clan del Golfo, lo que podría recrudecer la violencia en la región. La situación se vuelve aún más crítica debido a la presencia de otros actores armados ilegales como el ELN, disidencias de las FARC y el EPL, que se disputan el control de rutas estratégicas para el narcotráfico y economías ilegales.
En las últimas semanas se han registrado enfrentamientos armados y ataques contra la Fuerza Pública, reflejando un preocupante deterioro de la seguridad en esta zona del país. Organizaciones sociales y líderes comunitarios advierten sobre una posible crisis humanitaria, debido al confinamiento, desplazamientos forzados y amenazas contra la población civil.
Los habitantes han elevado un llamado urgente al Gobierno Nacional para que tome medidas inmediatas y refuerce la presencia institucional en el territorio. Piden acciones concretas que garanticen la protección de las comunidades, el restablecimiento del orden público y la atención integral a las víctimas del conflicto.
